No es ni mucho menos la primera vez que nos acercamos a ver a Minima Son, pero cada nueva visita a Gabriel y Marola nos deja sorpresas, una evolución en su set list y una enorme madurez en los temas mas habituales.
En una mañana soleada y calurosa como pocas en el mes de octubre, nos plantamos en la magnífica terraza de la Taska Tenda para deleitarnos con el talentoso dúo acústico mientras saboreábamos una cerveza al sol del mediodía.
No os voy a contar de nuevo lo maravillosa que es la voz de Marola ni la grandeza a la guitarra del maestro Gasio, pero si que vuelvo a insistir en que os acerquéis a verlos en cuanto tengáis ocasión.
El domingo nos ofrecieron un set de lo mas variadito como suelen hacer. Desde clásicos de siempre como Frank Sinatra o Audrey Hepburn, pasando por sus habituales boleros como son el "Historia de un amor" o el "Quizás" y por supuesto algo mas rockero como el "Dust in the wind" de Kansas o el "Dreaming" de Blondie que habitualmente versiona Imelda May.
Dejo aparte dos temas que me gustaron especialmente y que creo que se adaptan genialmente a la voz de Marola. Me refiero al "Lela" de Dulce Pontes y a la adaptación del poema "Negra sombra" de Rosalía de Castro que hizo en su día Luz Casal y que Minima Son bordó.
En resumen, una vez mas disfrutamos de un tranquilo y agradable momento de música. No todo es electricidad, brincar y sudar, y para esos momentos que simplemente te apetece sentarte a escuchar algo sutíl tocado con el corazón Minima Son es siempre una buena elección.
Salúd y ¡Rock & Soul & Things!
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