lunes, 10 de agosto de 2015

Ribeiro Blues, un festival joven pero con mucho cuerpo


En un entorno natural realmente difícil de mejorar se celebra desde el año pasado el Ribeiro Blues Wine Festival, un festival cuya organización pretende acercar al encantador pueblo Castrelo de Miño el mundo del blues y asociarlo con el del vino, que por esa zona abunda en cantidad y calidad. La verdad que el proyecto promete, y es que poder degustar de una copa de algunos de los mejores vinos de la denominación de origen Ribeiro disfrutando de blues en directo es un lujo, mas aún si tenemos en cuenta que tras el escenario se encuentra el río Miño y que la entrada al festival es totálmente gratuita.

La verdad que no puedo extenderme mucho a hablar como me gustaría de los músicos participantes, pero es que ocho bandas en dos días son muchas bandas, y para no aburriros os contaré lo mas brevemente posible lo vivido, que os aseguro que fue la leche.

Los primeros en hacer sonar blues en el Miño fueron The Big Lis Gumbo Band, una banda de A Coruña que seguimos hace tiempo y que deseábamos ver en directo, no nos defraudaron. Versiones interpretadas con mucho talento por una banda en la que todos rayan a gran nivel, pero en la que destaca la poderosa voz de Iria Lis, que con su talento y presencia consigue llenar el escenariocon facilidad. Sin duda un modo enorme de abrir el festival, y desde aquí os recomendamos que busquéis su disco "The Bait Of Blues" (que podéis encontrar en su bandcamp), no tiene desperdicio.

The Big Lis Gumbo Band

Tras comenzar con ese bofetón de puro blues de Chicago le tocó el turno a algo mas festivo. The Tetas Van pusieron el punto alegre de la jornada con sus adaptaciones rockeras y "galeguizadas" como el "Bicos de Nai" que pusieron a bailar a todo el personal. Sin duda esta banda ourensana formada por todo chicas a excepción de su guitarrista Omar son un auténtico seguro anti-aburrimiento.

The Tetas Van

Con la gente poco a poco mas enchufada llegó el momento álgido de la noche del viernes y para un servidor de todo el festival. Desde el mismísimo Chicago le tocaba el turno al genial Khalif Wailin' Walter, que desde el minuto uno de actuación nos dejó boquiabiertos con una intro en la que sobre el escenario solo se encontraba su banda pero su guitarra sonaba igualmente, hasta que tras varios minutos de virtuoso y sutil guitarreo aparecía por entre el público para saltar al escenario y comenzar lo que fue un auténtico vendaval de blues.

Nos dejó temas de sus dos trabajos, versiones de los mas grandes y todo un espectáculo no solo por su maravilloso modo de tocar la guitarra y de cantar, si no por la auténtica fiesta que montó bajándose a tocar entre el público en varias ocasiones e incluso subiendo a una chica al escenario para cantarle una "enternecedora" canción de amor. Sin duda genio y figura este bluesman, que os aseguro es de lo mejorcito que he visto en largo tiempo.

Khalif  Wailin' Walter
Khalif  Wailin' Walter










Salir después de tal despliegue de talento era una tarea bastante jodida, pero la elección fue muy acertada por parte de la organización, pues quien mejor para salir como si nada hubiese pasado que una banda con las tablas de la J. Teixi Band. Ellos simplemente se subieron al escenario y dieron su habitual espectáculo de rock and roll con pinceladas de música negra y mucha no, ¡muchisima actitud sobre el escenario!. Nos dejaron algunos temas de su último trabajo entremezclados con sus grandes éxitos. Un gran modo de cerrar la primera jornada.


Tras el primer e intenso día, el sábado comenzaba de modo muy potente con los compostelanos The Trio, que nos dejaron una poderosa dosis de blues rock con la contundente batería de Andrés Rivas, el soberbio Castor Montes a la guitarra y a las cuatro cuerdas y con una espectacular voz Victor García. Muy bueno este power-trio que no conocía y que sin duda habrá que seguir muy de cerca. A mitad de su actuación se les sumo Jeb Rault, con el que hicieron una minigira acompañándole como banda,  y desde luego que me sorprendió gratamente el americano. Una auténtica barbaridad a la guitarra y una sublime voz. Me había gustado mucho su disco pero su directo está muy por encima de lo que había escuchado.

The Trio
Jeb Rault










Tras el torbellino Rault la cosa se relajó mucho con Virginia Labaut, sin duda el concierto mas tranquilo del festival, pero no exento ni mucho menos de talento. Dos guitarras acústicas, un slide y una dulce voz les bastó para encandilar al público. Virginia no es la típica cantante que te arrolla con un chorro de voz, pero no le hace falta, tiene algo que te engancha en esa melodiosa voz y ademas de eso mucho gusto, pues la enorme influencia de la música negra en sus temas era mas que palpable.

Virginia Labaut

El plato fuerte de la noche sin embargo fue a mi parecer lo que salio a continuación. Shanna Waterstown al contrario que Virginia si que es la típica cantante que te arrolla con su voz y su poderío sobre las tablas. Si a eso le unes la pedazo banda que le pusieron detrás llamada The Hawks, entre los que destacaba Jeb Rault que se volvía a subir al escenario, el resultado solo puede ser uno. ¡Espectáculo! Mucho blues en la banda y mucho soul en la voz de Shanna, dándonos una combinación que en muchos momentos consiguió ponernos los pelos como escarpias.

Shanna Waterstown
The Hawks










Ya para terminar una banda de Ribadavia que tocaba casi en casa y que me sorprendió por su frescura, simpatía y energía sobre el escenario. Johnny Cat & The Poor Dogs tocan versiones y algún tema propio con un despliegue absolutamente impresionante. Dos guitarras, bajo, teclado, batería, saxo y trombón tocados todos como ya os dije con mucha alegría y calidad. Sin duda el festival acabó en modo fiesta a pesar de las altas horas y el frío gracias a ellos.

Johnny Cat & The Poor Dogs

En definitiva, un festival que crece y quiere seguir creciendo más el año que viene. Buenas bandas nacionales y músicos internacionales que aportan no solo por ser de fuera, que eso no asegura que sea mejor, si no porque demostraron muchísimo nivel. Esperemos que tenga una larga vida este festival, ¡nosotros no nos lo perderemos el año que viene!

Salú y ¡Rock & Soul & Things!









No hay comentarios:

Publicar un comentario