Acostumbrados como estamos a formaciones de cuatro o incluso cinco músicos, lo de este domingo es uno de esos ejemplos de que a veces menos es más, y lo comprobamos por partida doble con dos dúos.
Que venga a Cangas ni más ni menos que Dexter Romweber para tocar los temas de los míticos Flat Duo Jets es desde luego todo un acontecimiento, acontecimiento que además tuvo el mejor complemento con dos discipulos aventajados llegados desde la orilla del Lérez como son Thee Blind Crows.
Precisamente los pontevedreses abrían el concierto, visiblemente enchufados por tocar con una banda que sin duda ha sido referencia para ellos. Con la potencia y brutalidad habitual no tardaron ni dos temas en hacer sudar a la gente. La fórmula no ha cambiado ni falta que les hace, guitarra cruda pero con mucho blues, perfectamente acompañada por la batería más salvaje que uno se pueda imaginar. Todos unos rompecuellos que nos dejaron sus ya clásicos temas del "Primitive Loud Blues" y sus anteriores álbumes, aderezados con los que formarán parte de su nuevo e inminente trabajo "Back From The Cave", del que ya conocemos incluso la portada (preciosa por cierto).
La verdad es que salír después de semajante vendaval no es facil seas quien seas, pero hay que reconocer que Dex & Crash no defraudaron. Bajaron las revoluciones pero no la intensidad. Armado con una vieja guitarra y sin ni tan siquiera un triste pedal, Dexter nos dió una lección de rock and roll de la vieja escuela, utilizando solo como arma sus seis cuerdas y jugando con la distorsión de su ampli. Por detrás, Crash LaResh tocaba la batería de pie con mucha clase, con gestos técnicos de gran nivel y un ritmo endiablado.
Al contrario que Thee Blind Crows, el dúo americano nos mantuvo toda la noche en una constante montaña rusa, intercalando algunos de sus temas de corte mas surf y garageros con otros más pausados y llenos de melancolía. Daba gusto verlos tocar a ambos.
Tras la peculiar anécdota que nos dejó el cinturón de Dexter, que dejó de cumplir su misión de mantener arriba los pantalones del guitarrista (cosa que no impidió que siguiese tocando), se fueron casi sin hacer ruido, pero habiendo dejado una lección de como hacer rock con lo mínimo.
Al final vimos dos dúos con una misma fórmula pero dos estilos diferentes, la potencía del salvaje "blues-punk" de Thee Blind Crows contra el rockero y enérgico "proto-psycobilly" de Dex & Crash. ¡Cuanto con tan poco!
Salúd y ¡Rock & Soul & Things!
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